Acto de consagración de la familia al CIM
Acto de consagración de la familia al Corazón Inmaculado de María.
Oh, Corazón Inmaculado de María, Madre del Corazón de Jesús, Madre y Reina de nuestro hogar, para cumplir con tu ardiente deseo, nos consagramos a Ti, y te suplicamos reinar sobre nuestra familia. Reina sobre cada uno de nosotros y enséñanos a hacer reinar y triunfar en nosotros al Sagrado Corazón de tu Divino Hijo, como Él reinó y triunfó en Ti.
Reina sobre nosotros, oh Madre muy amada, con el fin de que seamos tuyos tanto en la prosperidad como en la adversidad, en la alegría como en la tristeza, en la salud como en la enfermedad, en la vida y en la muerte. Oh, Corazón compasivo de María, Reina de las vírgenes, cuida nuestras almas y nuestros corazones, y presérvalos del raudal del orgullo, de la impureza y del paganismo por el cual lloras tan amargamente. Queremos reparar muchos crímenes cometidos contra Jesús y contra Ti. Te imploramos por nuestros hogares, por los de nuestro país y por los del mundo entero, la paz de Cristo en la justicia y en la caridad.
Por eso prometemos imitar tus virtudes por la práctica de una vida cristiana y la frecuente y ferviente Comunión, sin respetos humanos. Venimos a Ti con confianza, oh Trono de Gracia y Madre del Hermoso Amor, inflámanos del mismo fuego divino con el que fue abrasado tu Corazón Inmaculado. Enciende en nuestros corazones y en nuestro hogar el amor a la pureza, un celo ardiente por las almas y el deseo de una santa vida en familia. Aceptamos ahora todos los sacrificios que exige de nosotros la vida familiar y los ofrecemos al Corazón de Jesús por tu Inmaculado Corazón, en espíritu de reparación y de penitencia. Amén.